domingo, 4 de octubre de 2009

Mi primera historia de terror


 Poniéndome al día con este mes súper patriota como es la celebración de Halloween, único, grande, nuestro, tal y como es la Coca-Cola de chilena, comenzaré con una historia de terror vivida al principios de mi vida, cuando aún no me sabia sonar los mocos sola , cuando usaba vestidos de lana tejidos por mi madre hechos de otros chalecos desarmados de mi hermana mayor ( eso era súper Cool en la época, ya ? ) y estábamos viviendo en nuestra primera casa sólida :

  Cuenta la historia, tal vez tergiversada de descendiente a descendiente, que una vez en una noche Otoñal, después de una visita de mi hermana mayor con su hija de pocos meses, la familia entera salió a la reja a despedirlos . Haciendo buena memoria no era una reja como tal , era un proyecto para nuestra futura reja  .Estaban unos palos parados haciendo de espanta ladrones .Bueno, la cosa es que la economía de la casa era a Full, no se pagaba la cuenta de la Luz para poder comer , entonces iluminados por velas y su luz tenue, estábamos, mis hermanos y yo, ordenando las cosas para el nuevo día de colegio que nos esperaba  ( la Jime , el Chalo y el Leo que estaba bebé) Estábamos muy sumidos en nuestros deberes y mi madre cocinaba para darnos la última comida antes de dormir , yo , que he sido siempre muy miedosa, vi por la ventana que una sombra se asomaba . Me paralicé , no pude gritar porque tenía que confirmar visualmente que no había sido mi imaginación . Al volver a mirar la ventana la sombra estaba muy clara y más horrorífica que antes y con los hechos consumados me puse a gritar más que protagonista de una película de Alfred Hitchcock; como la histeria colectiva es fuerte en mi casa todos mis hermanos gritaban desaforados junto conmigo y mi Madre trató de poner algo de calma ( pero el susto no lo podía disimular ) preguntó qué pasaba y yo, entre llanto e hipo, le conté cuál había sido el hecho paranormal que acababa de presenciar; mi madre se persignó y nos dió instrucción de gritar a todo lo que nuestros pulmones podían sólo garabatos e improperios ( Su abuelita había dado este genial consejo para espantar a los fantasmas y de paso aligerar el alma de malos pensamientos ) Al comienzo nuestros gritos fueron débiles por la presencia materna y porque eran garabatos ... y los garabatos jamás se dicen delante de los padres ..... Entonces mi mamá se asomó a la ventana con mucho temor y como también vió al fantasma se puso a gritar más fuerte y como nunca la había visto así ,esto me causo más terror que la misma visión del fantasma...... Dentro de la histeria colectiva (no sé cuanto tiempo estuvimos así ) la lista de garabatos para espantar al fantasma ya se hacían repetitivos y la visión fantasmagórica realizó lo impensable : GOLPEO LA PUERTA ... No eran golpecitos ….. No Señor ....eran golpes para echar la puerta abajo (Si el pánico fuera medible ,antes que tocaran la  puerta ya era dramática la situaciòn ; después de los golpes era de manicomio) . Los golpes cesaron en la puerta principal y comenzaron a empujar la otra puerta que daba al patio trasero hasta que ésta se abrió..... (No sé como no hubo ningún desmayo, sobre todo de mi madre) y entró mi cuñado ( marido de mi hermana mayor) con una cara de Superman salvador y evidentemente preocupado por lo que nos estaba pasando.

  Las explicaciones no se hicieron esperar en un clima donde abundaban las lágrimas y las caras de espanto. Bueno, mi cuñado al lograr entender algo de lo que contábamos atropelladamente se puso a reír de una manera nerviosa y a carcajada limpia . Nosotros que pensábamos que ya se había chalado y que no había podido soportar el impacto de nuestra historia lo mirábamos impávidos.

  Cuando logró calmar su risa nos contó todo: Mi hermana al llegar a su casa se dió cuenta que se le había quedado en nuestra casa el chupete de su bebita (Sin este artefacto esencial el bebé lloraría sin consuelo en la noche), entonces le pidió a su marido que lo fuera a buscar urgente . Mi cuñado llego a nuestra casa y como silbó, gritó, y nadie lo escuchó, entró por los escasos palos de nuestra reja y se asomó por la ventana; a la primera que vió fue a mi, entonces pensó que yo iría de inmediato a la puerta principal para abrirle y hacerlo pasar; como yo me quedé quieta se asomó un poco más y fue cuando comenzó todo el mal entendido. Mi cuñado no sabía por qué yo gritaba y tal vez pensó que yo lo había confundido con un ladrón, entonces salio fuera de la reja para que lo vieran bien, como seguíamos gritando y ya estaba medio nervioso caminó nuevamente a la ventana  de manera lenta y fue cuando mi madre se asomó; con esto mi cuñado ya pensaba que estaba salvado del mal entendido y esperó a que ahora sí le abriríamos  la puerta y cual no fue su sorpresa y espanto al ver que todos gritábamos. Entonces todo nervioso trató de mirar para ver qué pasaba en el interior de nuestro hogar, ya que  nos veía gritar sin ton ni son. Por eso golpeó la puerta principal...... como esto no dió resultado se fue a la puerta trasera para salvarnos..... ¿Salvarnos de qué?

  En ese momento él no sabía que nos estaba salvando de.... un fantasma...el más horrorífico y espantoso que algún día alguien pudiese ver.... MI CUÑADO.

4 comentarios:

  1. jajajajajajjjaaaaaaaaaaaaa

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  2. Bueno, mi cuñado también a veces es un fantasma (porque no tengo)...

    Me reí bastante, algo difícil en mi.

    Saludos !

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  3. De verdad la cruda realidad de la historia me dejo conmovido, y no puedo decir mas que lo traumatico de la situacion pudo haber causado anomalias severas si no se hubiese aclarado el peisodio aquel, pero de que me rei me rei.....

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  4. La vida es una comedia.
    Uno determina su rol, eso si.

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